Con un trabajo en la lomita, casi perfecto de Edgar Nodier Vega, y las miradas y vítores ausentes de las muchedumbres que solían asistir al coliseo davideño, Chiriquí consiguió la primera victoria en la ronda de ocho, tras derrotar a la novena de Herrera nueve carreras a cero, en el estadio Enrique Kenny Serracín el 27 de marzo de 2012.
El gualaqueño, permitió un solo imparable, el cual se generó en el primer episodio y de allí, hasta la parte baja del octavo episodio, el serpentinero de casa, neutralizó a los herreranos. Lo sucedió en la gomita de lanzar, al tirador Abimael Caballero, quien cerró la pesada puerta en la cara de la novena herrerana, con verraquera y todo.
Gustavo González, cargó con la derrota, por los herreranos, quienes no pudieron anotar ni una sola rayita en el marcador.
Recordando el 26 de marzo, la novena chiricana se dejó sacar el resultado del bolsillo, luego de estar ganando, durante las primeras 7 entradas, bajo el brazo de Kenneth Batista; lanzador que solo en sus mejores días había tirado, tal clase de pelota.
Partido que fue presenciado por las miradas atónitas de una reducida concurrencia, contemplaron lo indecible para ellos, el regreso del equipo veragüense, que perdía 6-0.
Los veragüenses terminaron ganándole por la mínima diferencia a un Chiriquí, desmoralizado y necesitado del apoyo de la afición. Fanaticada que no está asistiendo al Kenny, por los elevados precios de entrada, otros porque consideran ala dirigencia es muy parca; otros, juzgan que las condiciones endebles y paupérrimas, han perdido atractivo, etc.
En el primer partido en la carretera, Bocas del Toro, con el equipo de ensueño, liquidó a la tropa chiricana cuatro carreras por cero, en el Calvin Byron de Changuinola.
Partido lo perdió el dominicano, Frankelis Osoria, quien trabajo 7 entradas, permitió 7 imparables y 4 carreras, que le acreditaron la derrota.
Chiriquí a pesar del obscuro panorama que se entreteje, ante el rumor de la posible renuncia del presidente de la Liga Provincial de Beisbol, Alcibíades Martínez y la poca simpatía con la que goza el equipo, continúa ofertando resistencia y se encamina a futuros encuentros